“Somos como médicos y cirujanos de los edificios. Los ponemos guapos y sanos”

Lleva prácticamente toda su vida dedicándose a la rehabilitación de edificios en Alicante y en otras muchas ciudades. Casi la última década en Grupo BDI, lo que le convierte en el operario con más atingüedad. Raimundo González, oficial de primera en obras de rehabilitación y más conocido como ‘Rai’ entre sus compañeros, nos explica cómo es desde dentro el sector de la construcción.

– ¿En qué consiste tu trabajo?

– Básicamente consiste consiste en rehabilitar edificios, en ponerlos guapos. Reparo pilares, forjados, cubiertas, fachadas, pavimentos… Llevo prácticamente toda mi vida arreglando edificios.

– ¿Qué es lo que más te gusta de la labor que desempeñas?

– En general todo, porque no es monótono y nunca estás haciendo la misma cosa. Si tengo que destacar algo creo que me quedaría especialmente con el revestimiento de fachadas. Cuando las dejas terminadas y con el paso del tiempo pasas por un edificio que has hecho tú es muy gratificante saber que has contribuido al bienestar de sus propietarios o inquilinos y al buen estado de la zona de la ciudad en el que se encuentra.

– ¿Por qué es importante la rehabilitación de un edificio?

– Por mantenerlo conservado, si no tarde o temprano se vendría a pique parcial o totalmente y podría causar daños incluso personales. A veces nos sentimos como los médicos de los edificios, los cirujanos. Los sometemos a operaciones para ponerlos sanos y guapos. Es muy gratificante.

– ¿Se acostumbra uno a trabajar en las alturas cuando se trata de una comunidad vertical?

– Hay gente que sí y gente que no .Yo por ejemplo sí. Llevo casi toda la vida en esto y trabajo en las alturas con la misma comodidad que lo hago a pie de calle. ¡Conozco de algún compañero que ha trabajado en las alturas y lo ha tenido que dejar por el vértigo que te entra al trabajar a mas de 30 metros sobre el suelo! Es una tarea para la que hay que estar muy preparado y especializado. En Grupo BDI sin duda todos los integrantes de la plantilla lo están.

– ¿De qué trabajo de todos los realizados en estos años te sientes más orgulloso o recuerdas con especial cariño? 

– Recuerdo con especial cariño uno muy reciente: el Edificio Victoria, situado en la Explanada de Alicante. Realmente el cambio tanto estético como funcional ha sido espectacular y la situación donde se encuentra lo hace todavía más llamativo.

– Seguramente tendrás cientos pero, ¿destacarías alguna anécdota especial de tu larga carrera?

– ¡Hay muchas, pero algunas se recuerdan más que otras! Por ejemplo, cuando un compañero de trabajo y yo estábamos con una pistola de plastificar que tira la pintura a presión. Me tocaba pintar a mí, pero estaba él delante y me dijo que él sabía. Lo puse a pintar y no sé qué hizo que no iba la pistola y cogió, se volvió con la pistola y el gatillo mirándola y apretó el gatillo. ¡Imagínate como se puso, tenía pintura hasta en los ojos! [risas].

– ¿Qué crees que distingue a BDI de otras empresas?

– Nos inculcan desde la dirección de la empresa que los trabajos deben ser nuestra tarjeta de visita. En nuestro trabajo es muy importante cumplir siempre con un trabajo bien hecho, ya que el boca a boca nos da luego más trabajo. Además, es bonito cuando terminamos una obra y los vecinos te dan la enhorabuena por el trabajo que has hecho. Es muy gratificante.